Los dientes son estructuras anatómicas calcificadas que se localizan en la cavidad oral de muchos animales vertebrados. Son órganos duros y pequeños, cuya función principal en los mamíferos es la masticación, pero no todos los seres vivos los usan con este cometido. Por ejemplo, reptiles y algunos peces se sirven de ellos como método de defensa, para el agarre de presas e, incluso, como parte del cortejo reproductivo.
Aunque muchos mamíferos presentamos dientes, su disposición y características varían drásticamente en función del taxón consultado. Por ejemplo, el armadillo gigante (Priodontes maximus) se lleva la corona en lo que a dentición se refiere en el mundo de los mamíferos, pues posee un total de 100 piezas dentales. En comparación, el ser humano se queda bastante corto, con una cifra total de 32.
Cuando hablamos de los 6 tipos de dientes, nos referimos a aquellos que componen el aparato bucal humano, pues son, sin duda, los que más se han estudiado desde un punto de vista funcional y anatómico. Hoy te contamos todo lo que debes saber sobre ellos, con ayuda de algunos datos y curiosidades cuanto menos sorprendentes.
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¿Qué son los dientes?
La Real Academia Española de la Lengua define a los dientes como “un cuerpo duro que, engastado en las mandíbulas del hombre y de muchos animales, queda descubierto en parte, para servir como órgano de masticación o de defensa”. La estructura de los dientes es similar en casi todas las especies de seres vivos que los presentan, si bien existen ciertas particularidades. En general, podemos distinguir las siguientes secciones (de dentro a afuera):
- Pulpa dentaria: un tejido conectivo laxo localizado en el interior del órgano dental. Llama la atención la presencia de los odontoblastos, células encargadas de la producción de dentina.
- Dentina: un tejido intermedio, el segundo más duro de todo el cuerpo, que compone la mayor parte del diente. Es amarillento y altamente elástico.
- Esmalte: una cubierta compuesta por hidroxiapatita que recubre la corona de los órganos dentarios. Es esencial para que se produzca correctamente la masticación.
Los dientes de los mamíferos tienen raíces profundas, pues, aunque no lo parezca, aproximadamente un tercio de ellos se encuentran situados por debajo de la encía. También es necesario no olvidarnos de la flora bacteriana que habita en nuestra cavidad oral: hablamos de alrededor de 300 especies de microorganismos diferentes, de naturaleza comensal o simbionte.
¿Qué tipos de dientes existen?
Generalmente se distinguen 4 tipos de dientes (incisivos, caninos, premolares y molares). Aun así, nosotros queremos aportar una visión un poco más especializada, en base a otros parámetros más allá de la localización. Sigue leyendo, pues te presentamos los 6 tipos de dientes en las siguientes líneas.
1. En base a su permanencia
No tiene nada que ver un diente de leche con uno definitivo. Por ello, establecemos la primera distinción de todas en este punto. Te contamos las particularidades de estos dos tipos dentales.
1.1 Dientes temporales (de leche)
La mayoría de los niños presentan un juego de 20 dientes deciduos a los 3 años de edad, comenzando su aparición a los 6 meses después del parto, como norma general. Cada infante es diferente, pero usualmente las primeras piezas dentales en salir son las de la parte delantera de la boca, tanto arriba como abajo. El recambio por los dientes permanentes se produce de forma paulatina hasta los 12 años.
Como hemos dicho, en la dentición temporal solo hay 20 dientes: 8 incisivos, 4 caninos y 8 molares. Los dientes de leche son más pequeños que los permanentes y, además, presentan unas capas de esmalte y dentina más delgadas, un cuello y corona más estrechos y unas raíces más largas y finas, entre otras cosas.
1.2 Dientes permanentes
Los dientes permanentes son los que suceden a los temporales, y normalmente a la edad de 12-13 años todos los niños han sufrido una reestructuración dental completa. A medida que crece el maxilar del infante, los dientes deciduos se presentan más separados, pues la anatomía propia del individuo está dejando más espacio para los futuros 32 dientes definitivos.
2. Clasificación típica
Ahora sí, te presentamos los 4 tipos de piezas dentales que seguramente ya conozcas. Cada una de estas piezas irá ejemplificada con ciertos datos y estadísticas muy interesantes.
2.1 Incisivos
Los incisivos realizan, de un 100% total de trabajo, el 10% en la tarea masticatoria y el 90% restante en las labores de índole fonética y estética. En el ser humano, son un total de 8 piezas dentales (4 en la arcada dentaria superior y 4 en la inferior), situadas en la parte frontal de la boca. Los incisivos superiores son más grandes que los inferiores, y su función principal es cortar alimentos y permitir la producción de sonidos.
Sí, aunque no lo parezca, los incisivos juegan una labor esencial en el habla del ser humano. Por ello, no sorprende conocer que, cuando faltan o se encuentran mal posicionados, la fonética del individuo se ve perjudicada. En muchos casos, las ortodoncias no se colocan únicamente con fines estéticos, sino para mejorar la fonación.
Además, tampoco hay que subestimar la función estética de estas piezas dentales. Los adultos sonreímos una media de 25 veces al día, y estos son los dientes que más se observan en este gesto de complicidad, alegría y emoción. Una mala higiene o forma de los incisivos suele ser indicativo de baja condición socioeconómica, problemas de autoestima o falta de cuidado personal.
2.2 Caninos
Los caninos realizan, en base a su trabajo total, un 20% de función masticatoria y un 80% de índole fonatoria y estética. Existen un total de 4 caninos, 2 superiores y 2 inferiores (uno a cada lado), limitando el sector bucal anterior y posterior. Como su propio nombre indica, su función más conocida es la de desgarrar la carne.
Una de las características más llamativas de los caninos es que los superiores se consideran las piezas dentarias más largas en el ser humano. Estos dientes son especialmente esenciales en mamíferos depredadores, pues se utilizan para desgarrar la carne de las presas, pero, además, como elemento comunicativo. Cuando un cánido, un primate o un felino enseña sus caninos, es que una reacción agresiva se aproxima.
2.3 Premolares
Los premolares realizan un 60% de trabajo masticatorio y 40% fonador/estético. Van justo después de los caninos y son un total de 8, 4 en la mandíbula y 4 en el maxilar (2 a cada lado, respectivamente). Su forma se caracteriza por presentar 2 picos (cúspides) y una raíz, que acaba en 2 puntas.
Son dientes de transición, que fusionan las labores de los molares y los caninos. Por ello, participan principalmente en la masticación y trituración de alimentos, pero también en el despiezado de fragmentos que no se hayan cortado lo suficiente por estructuras previas. Son más pequeños que los molares.
2.4 Molares
Los molares reparten su trabajo de la siguiente forma: más del 90% en el trabajo masticatorio y menos del 10% en el habla y estética. Debes tener en cuenta que, por mucho que muestres tu sonrisa, lo más probable es que los molares no se vean en ningún momento: su única función es despiezar la comida para que pueda pasar fácilmente por el esófago.
En total son 12 piezas bucales, a razón de 3 por cada arcada (6 arriba y 6 abajo), completando así la línea dental. A diferencia de los premolares, estos presentan una mayor superficie, tamaño y 4 cúspides o puntas. Son los dientes más proclives a presentar caries, ya que sus fosas y fisuras acumulan fácilmente sustancias de desecho y colonias bacterianas patógenas si no se limpian correctamente.
Los últimos molares de todos (o terceros molares) son popularmente conocidos como muelas del juicio, que pueden erupcionar (o no) a partir de los 17 años de edad. Se ha documentado que es una tendencia evolutiva la desaparición de estas estructuras, pues las nuevas generaciones las presentan cada vez menos. A día de hoy, se consideran dientes vestigiales.
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Resumen
Hemos hecho un recorrido amplio por la estructura bucal humana, mostrándote los 6 tipos de dientes en base a su permanencia a lo largo de la vida del individuo y su localización y función en el aparato bucal. Llaman la atención los porcentajes recogidos, pues los incisivos, aunque no lo parezca, tienen una función mucho más enfocada a la comunicación que a la masticación, por ejemplo.
Por otro lado, los caninos juegan un papel esencial en las señales de aviso en mamíferos, pero en el ser humano, su funcionalidad es únicamente masticatoria. Como podrás observar, una sola estructura puede perfeccionarse de maneras distintas y adquirir funcionalidades diversas en base al contexto evolutivo de la especie.
